sábado, 21 de diciembre de 2013

Recuerdos amargos


El encantamiento duró poco, descubrí que me engañaba, bueno en realidad que engañaba a otra. La firme se llamaba Kiara creo, no recuerdo. No era bonita, ni de buen cuerpo, pero tenía dinero. Así que como dicen "Billetera arregla fachada, pared y columna". A pesar de saber que estaba con ella, pues yo decidí seguir saliendo con él, la verdad que no podía dejarlo, por más que lo intentara. Hasta que decidí marcar el fin definitivo de aquella relación.

Cuando me alejé de él, me sentí mal al comienzo, pero él no me llamo, ni me busco y me elimino de Facebook, así que me sentí bien de ya no seguir con un tipo tan inmaduro. Al poco tiempo descubrí que Kiara se había enterado de lo mio con Carlos, pero decidió perdonarlo. Que cojuda, la verdad!. Me bloquearon, cual niños. No es que yo sea muy madura pero tampoco soy tan infantil como para hacer eso. Días después estuve recordando a una relación pasada con Sergio que era un chico lindo y dedicado a estudiar aveces.

Estábamos en la universidad juntos, eramos amigos. Nuestra amistad comenzó porque yo había terminado con Jaime quien fue el enamorado más celoso, impulsivo y agresivo que he podido tener y él con una chica llamada María. Al paso del tiempo nos fuimos conociendo y había química, bueno aparte del curso que llevábamos juntos. Nos sentábamos atrás y todos nuestros amigos decían que seríamos una linda pareja. Bueno eso pensaban hasta que conocieron a Alonso, que les pareció un buen partido de lejos. Pero bueno, Sergio tenia lo suyo, era todo un seductor, me encantaba la manera en que sus ojos observaban cada parte de mi rostro, como al terminar cada beso me daba un pico de 5 segundos, como rozaba mis mejillas, etc. Fue la segunda persona que me enamoré de verdad.

Pasamos casi dos años juntos. Años de problemas pero de mucha felicidad. Lo amé de pies a cabeza, su alegría y su tristeza, su forma de ser, todo. A veces nos cruzábamos con Maria, su ex. Pero él tantas veces me había recalcado que no iba a dejarme por ella que no le tomaba importancia a los cambios físicos de Maria, quien había bajado de peso, se empezaba a maquillar, pero igual seguía siendo fea.

Al poco tiempo, Sergio y yo terminamos por asuntos personales que no puedo decirlo por que es parte de mi privacidad. Él se fue de mi vida para siempre y con él se fue el dinero que gaste en todos esos regalos ridículos, estuve a punto de comprar anillos para hacer una ridícula boda de broma que hacen entre enamorados pensando que se van a casar algun día. Bueno todo eso ¿para que? para que me deje por ese nuevo palo pintado andante. Tanto que me decía "no voy a volver con ella, fue el peor error de mi vida, solo te quiero a ti, el destino nos unió de esa forma porque sabia que lo nuestro si iba a ser especial" puro floro barato y con lagrimas de cocodrilo incluidas, todo en el mismo paquete.

Maldito destino el que me hizo perder dos años de mi vida con él que era tan poca cosa para mi. Lo volví a ver tiempo después cuando estaba en una heladería con unos amigos. Estaba con una amiga comprando cuando volteé y lo vi. María me vio y se puso cual culebra hambrienta, lo abrazo mas fuerte que como se suele dar un abrazo de oso entre personas que no se ven desde hace mucho tiempo. Me saludó, ¿para que lo hizo?, María salió muy enojada sin comprar ni un helado y él atrás de ella, cual perro sarnoso.

Mis amigos me apoyaron, me sentí fatal. Yo había estado enamorada de él por mas de dos años ¿cómo eso era posible?, con todos los que había estado no había durado ni dos meses!. Pero bueno el tiempo pasa y cura las heridas, ¿no?. Alonso fue un gran apoyo en todos esos momentos de depresión. Él siempre atento y protector, pero no lo pude ver de otra forma, era como mi hermanito (http://www.youtube.com/watch?v=g9U5j3I1pbM).

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